Ouagadougou - Al menos 14 personas han sido asesinadas mientras se celebraba el servicio religioso dominical en una iglesia protestante en Hantoukoura, en el este de Burkina Faso. Según las autoridades locales, un grupo armado entró en la iglesia alrededor del mediodía de ayer, domingo 1 de diciembre, abriendo fuego. El pastor y algunos niños murieron en el tiroteo, mientras que varias personas resultaron heridas.
Se trata del enésimo ataque contra lugares de culto cristianos y musulmanes, como parte de una estrategia denunciada por el presidente de Burkina Faso, Roch Kaboré (véase Fides 15/10/2019) y por los obispos locales (véase Fides 19/6/2019), con la intención de provocar una guerra confesional.
El 11 de octubre, 15 personas fueron asesinadas durante las oraciones del viernes en la mezquita de Salmossi en la región de Oudalan, en la frontera con Malí.
Varios líderes religiosos cristianos, católicos y protestantes, han sido asesinados en homicidios selectivos en los últimos meses, así como varios imanes han sido asesinados por yihadistas en el norte del país desde el comienzo de los ataques hace unos cuatro años.
Desde hace algunos años, Mali, Níger y algunas partes de Chad y Nigeria sufren asaltados por parte de varios grupos yihadistas. Burkina Faso está en el centro de la mira de estos grupos según una estrategia muy precisa: minar la coexistencia pacífica entre diferentes comunidades religiosas y provocar conflictos intercomunitarios. Burkina Faso ha sido un ejemplo de esta coexistencia pacífica para todos los estados de la región. Sumergir este país en el caos socavaría la seguridad del Sahel y sus alrededores. (L.M.) (Agencia Fides 2/12/2019)