Bossongoa – Una nueva 'última milla' donde viven unas 180.000 personas, un único hospital de 130 camas con dos médicos generalistas, sin especialistas, que hacen un poco de todo. Este es Bossongoa, lugar remoto y 'olvidado' del que acaba de regresar don Dante Carraro, director de Médicos con África Cuamm. “He estado en un país precioso pero tremendamente frágil e inestable: la República Centroafricana. Un viaje de ocho horas en coche por una carretera llena de baches, en dirección noroeste, nos llevó desde Bangui, la capital donde el Cuamm trabaja desde hace cinco años en el Centro Pediátrico con importantes resultados, hasta Bossongoa”, relata el misionero.
Don Dante describe la situación de inestabilidad e inseguridad que ha experimentado. "Cada 30 kilómetros un puesto de control y una parada obligada para el control de documentos. Nunca había visto tantos soldados como en esta zona. Sin duda es un país inseguro e inestable, pero también con un gran deseo de paz y de empezar de nuevo. Decidimos ir a Bossongoa, donde existe la tasa de mortalidad materna más alta del país y las necesidades son enormes. Ahora estamos aquí, en esta nueva última milla, olvidada por tantos, que nadie ve pero por la que, con la ayuda de todos, intentaremos poner de nuestra parte. Queremos intentar dar a los jóvenes africanos, a tantas madres y niños, un poco más de esperanza de poder encontrar respuestas a sus necesidades, allí donde nacieron y crecieron. Esto es lo que nos piden y lo que intentamos hacer con todas nuestras fuerzas”.
(AP/DC) (Agencia Fides 19/6/2023)