Feliz año Nuevo 2024 a todos. Os comparto un resumen de nuestro encuentro como frailes extranjeros en la provincia de San Joaquín de Navarra.
“¡Oh, qué bueno, qué dulce habitar los hermanos todos juntos!”. Sal 133, 1
Temprano el día de la fiesta de San Juan Evangelista, nos dirigimos hacia Santander donde nos esperaban los padres Alejandro y Ferney. Fuimos de Bilbao, Logroño, Vitoria y Pamplona.
Esta era la primera vez que nos reunimos en un encuentro de solo los extranjeros. Aunque somos de diferentes países tenemos la misma vocación de frailes carmelitas descalzos. El encuentro comenzó alrededor de las 11 de la mañana con el facilitador P. Ajay, consejero provincial y superior en Logroño. Cada uno de nosotros nos presentamos porque para varios era la primera vez que nos hemos visto en persona. Compartimos algunas cosas sobre nuestra vida y familia, lo que estamos haciendo aquí en España y cuáles son las dificultades y desafíos de vivir lejos de nuestro origen, así como nuestras expectativas. Estábamos muy atentos por escucharnos unos a otros. Compartimos sin vacilación ni timidez. Todos nos sentimos como en casa unos con otros.
El 27 de diciembre 2023 fue un día maravilloso para nosotros, los que estamos lejos de nuestra patria. Un día que todos recordaremos y atesoraremos. Como frailes carmelitas descalzos siempre se nos pide salir de nuestra propia zona de confort, ir hacia donde el Espíritu Santo nos lleva para la salvación de las almas.
Nosotros, los frailes “extranjeros” que vivimos, servimos y estudiamos en la provincia de San Joaquín de Navarra venimos de diferentes partes del mundo: Colombia, Congo, India, Indonesia, Malawi y Vietnam. En este momento somos doce frailes viviendo en varias comunidades de esta provincia. Hace unas semanas nos enteramos que todos los frailes “extranjeros” nos reuniríamos no solo para conocernos, sino para tener la oportunidad de compartir con otra comunidad y los frailes que viven ahí.
Todos estamos muy agradecidos a los Provinciales anteriores y el presente P. Jon Korta y a los frailes de la provincia de San Joaquín de Navarra por acogernos como sus hermanos y darnos la oportunidad para estudiar y servir en esta provincia. Extendemos este sentimiento de gratitud a los priores de las casas que nos han permitido ir a este encuentro, al mismo tiempo a la comunidad de Santander por acogernos.
Después de un largo compartir todos quedamos satisfechos con el espíritu de hermandad que hay en el Carmelo Teresiano. Como necesitábamos alimentar nuestro cuerpo también salimos todos a almorzar y disfrutamos mucho de la comida santandereana.
Si bien es cierto no importa donde estemos, siempre encontraremos alegrías y desafíos. Sin embargo una vez nos conozcamos y sepamos quiénes somos y hacia dónde nos dirigimos, las cosas serán más fáciles y manejables para nosotros.
Mientras continuamos con nuestra vida como Carmelitas Descalzos en la provincia ya sea como miembros, estudiantes o visitantes, nos gustaría ayudar y estamos dispuestos a hacer todo lo que podamos, según nuestras propias capacidades.
Esperamos con gozo tener más tiempo para compartir y estar juntos en un próximo encuentro.
Como San Juan evangelista, regresamos a nuestra comunidad con alegría y amor a Dios, a la Orden y al pueblo de Dios.
Que Dios nos bendiga a todos.
P. Anthony Nguyen Duc Thang