Jerusalén - La condición en la que viven actualmente los palestinos en Tierra Santa es “inhumana” debido a las iniciativas de los “colonos que ocupan, día tras día, la tierra palestina”, así como por la pobreza que sufren un millón y medio de habitantes en la Franja de Gaza, pero también por la demolición sistemática de casas y la humillación causada por los soldados israelíes en los puestos de control. Este es el sombrío panorama esbozado en el último informe elaborado por la Comisión “Justicia y Paz”- un organismo vinculado a los Obispos Católicos de Tierra Santa - sobre la base de los datos estudiados en la última sesión ordinaria, que tuvo lugar a principios de febrero.
En el dosier, recibido en la Agencia Fides, se documenta con detalles una situación “estancada y sin vida, sin luz de esperanza” sufrida tanto por los israelíes, que necesitan “seguridad y tranquilidad”, como por los palestinos, que esperan “el fin de la ocupación” y el desarrollo real como un estado independiente. En el documento, también se estigmatiza el progresivo proceso de “judaización” de la Ciudad Santa, y la lenta expulsión de Jerusalén de sus habitantes palestinos, golpeados indiscriminadamente de acusaciones de terrorismo.
El documento contiene un llamamiento a los líderes israelíes para que “amplíen” su propia visión y su propio corazón, reconociendo que “hay espacio suficiente en el país para todos nosotros”. Mientras que a los líderes palestinos se pide que “dejen que Israel y el mundo escuchen una única voz, una voz de paz y justicia para dos pueblos”, abandonando la lógica del egoísmo y la corrupción. (GV) (Agencia Fides 18/2/2016).