Yida – La emergencia en el campo de refugiados de Yida, Sudán del Sur, continua. Los fuertes vientos y lluvias torrenciales han destruido las tiendas de campaña dejando a miles de personas en una situación desesperada. Según fuentes locales, la mayoría de los residentes del campamento, alrededor de 35.000, se enfrentan al comienzo de la temporada de lluvias encontrándose a cielo abierto. No han recibido ni las tiendas ni las cubiertas de plástico que las organizaciones humanitarias tenían que distribuir antes de la llegada de las lluvias. Los caminos fangosos son un problema grave para el transporte de suministros de socorro y, a menudo son barridas por el agua, impidiendo a las organizaciones el poder transitar por ellos. Las raciones de alimentos se han reducido para los más de 700.000 refugiados y las organizaciones de ayuda humanitaria están reduciendo las ayudas. Los refugiados han lanzado un grito de ayuda solicitando la entrega de telones de plástico por temor a que la situación se deteriore aún más en los próximos días. Mientras tanto, ACNUR está planeando el movimiento de refugiados a otros campos. La estación lluviosa se extiende desde mayo hasta noviembre. (AP) (25/5/2016 Agencia Fides)