Erbil – La semana de celebraciones litúrgicas y comunitarias previstas con motivo de la fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz en Ankawa, un barrio en las afueras de Erbil predominantemente cristiano, terminó el martes 13 de septiembre por la tarde con una larga procesión desde la iglesia de San Jorge, acompañada con cantos y oraciones, y con una ceremonia en un estadio local. En estos momentos de devoción ha participado también una multitud de refugiados cristianos que desde la primavera de 2014 están en el campamento de refugiados de Ankawa, tras huir de las ciudades y pueblos de la Llanura de Nínive conquistados por las milicias yihadistas del Estado Islámicos.
Tanto en la procesión como en la ceremonia, han estado presentes muchos sacerdotes, religiosos y religiosas que trabajan en la atención pastoral de los refugiados, junto con el Arzobispo Bashar Warda – cabeza de la archieparquía caldea de Erbil - y con el obispo Bawai Soro, que por lo general lleva a cabo su ministerio pastoral al servicio de las comunidades caldeas en los Estados Unidos. Durante la ceremonia, la multitud de los presentes ha escuchado algunas lecturas bíblicas, los fieles en la oración comunitaria han pedido el don de poder regresar a sus hogares y el retorno de la paz en Oriente Medio.
Durante la semana de celebraciones, todas las iglesias y comunidades de Ankawa han tomado parte en un programa bien articulado que ha contado con momentos de oración, actividades recreativas e iniciativas de carácter social y caritativo, incluida la del “mercadillo de la caridad” que ha estado abierto durante toda la semana.. (GV) (Agencia Fides 15/9/2016).